Kol Hazikaron: educar desde la memoria para enfrentar el odio

Por: Mtra. Cynthia Grapa

In appreciation to the Conference on Jewish Material Claims Against Germany (Claims Conference) for supporting this educator training program.

El 13 de mayo regresaron a México los 22 líderes educativos que formaron parte de la tercera generación del viaje académico Kol Hazikaron: Los Sitios de la Memoria, organizado por la Universidad Hebraica, con el valioso respaldo de Claims Conference y la Fundación EVZ.

Durante once días, el grupo visitó algunos de los principales sitios vinculados a la historia de la Shoá en Alemania y Polonia. Desde Berlín hasta Varsovia, pasando por Lodz, Cracovia, Auschwitz y Majdanek, los participantes recorrieron lugares de memoria que dan testimonio de los crímenes del régimen nazi y de la dignidad de quienes resistieron. En cada sitio, tuvieron la oportunidad de dialogar, compartir su sentir y reflexionar de manera colectiva sobre el impacto de lo vivido. Esta vivencia profunda, sostenida en la escucha mutua y el encuentro humano, permitió abrir espacios de conciencia crítica y renovar el compromiso con la educación como herramienta para enfrentar el odio.

Este viaje no fue solamente una experiencia formativa. Fue, sobre todo, una plataforma de acción. A partir del contacto directo con los espacios donde ocurrió lo impensable, los docentes adquirieron una perspectiva más profunda y viva sobre el significado contemporáneo de la enseñanza de la Shoá. Comprendieron que recordar no basta: es necesario actuar.

Por ello, el regreso de esta delegación no marca el final de un recorrido, sino el inicio de múltiples proyectos escolares que verán la luz en los próximos meses en distintas instituciones educativas del país. Proyectos que buscarán fortalecer la conciencia crítica de los alumnos, fomentar la responsabilidad social y ofrecer herramientas pedagógicas sólidas para combatir la indiferencia, el antisemitismo, la negación del Holocausto y todas las formas de odio.

La Universidad Hebraica reafirma así su compromiso con una educación que dignifica, que humaniza y que forma ciudadanos capaces de reconocer en la memoria una brújula ética para el presente. Kol Hazikaron demuestra que visitar los sitios de la memoria no es un acto pasivo, sino un ejercicio de fortaleza, claridad moral y responsabilidad pedagógica. Educar desde la memoria es, hoy más que nunca, una forma de construir un futuro más justo.